Bodegas Ángel Benés Matute

Durante generaciones, en la familia Benés se ha ido trasmitiendo la pasión y el
respeto por la vitivinicultura de padres a hijos desde hace más de un siglo. El
tesón y el cariño con el que nuestros antepasados han vivido desde siempre el
cuidado de la vid y el vino ha llegado hasta la actualidad fomentándose y
mejorando gracias a nuestra adaptación al mundo moderno.

El origen de este amor por el vino se remonta a más de cuatro generaciones.
Desde el inicio, nuestra familia se ha dedicado al cuidado de la vid y a la
elaboración de vino; así como a su comercialización. Los cuidados han
evolucionado, pero también el almacenamiento, el envasado y la venta; pasando
desde los tradicionales pellejos u odres de piel natural para la venta a granel
hasta el actual embotellado y venta de un producto mucho más estable y rico en
valores.

Uno de los factores más importantes para obtener un vino de calidad, agradable
y con personalidad propia es la materia prima. Por ello, respetamos
minuciosamente los cuidados que damos a todos y cada uno de los viñedos de
las diferentes variedades de uva con las que obtener nuestros vinos, teniendo
siempre en cuenta las necesidades de cada variedad dependiendo del terreno
en que se encuentran.

Resulta imposible entender la innovación actual sin conocer su origen y evolución
desde las costumbres tradicionales. En Bodegas Angel Benés Matute tenemos
perfectamente integradas tradición e innovación, por ello, tras una selección previa
en nuestros viñedos de la materia prima ideal nuestros vinos son elaborados con
las más modernas instalaciones y reciben el mayor mimo y respeto que merecen
reposando en el calado centenario que forma parte del origen de la bodega y que
mantenemos perfectamente acondicionado para esta misión.